Continuamos la andadura, seremos señal de esperanza dentro y fuera y nos vamos con la misión de hacer de la vulnerabilidad una oportunidad para abrazar la humanidad herida, como mujeres que viven la fraternidad desde comunidades hogar y comunión
Porque es verdad que en todo camino y aventura: “son las contradicciones que purifican la obra”, porque si en un camino todo estuviese dado ya no necesitaríamos de Dios y eso sí, en nosotras sería mucho más terrible que cualquier final.
Si el Señor no construye la casa en vano, un Gobierno General planifica…y en vano nos hemos reunido…Ojalá podamos decir: “Es el Señor quien lo ha hecho y nuestros ojos se maravillan”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario